quinta-feira, 29 de outubro de 2009

CANONIZACIÓN DE UN SANTO: SAN RAFAEL ARNÁIZ / CANONIZAÇÃO DE UM SANTO: SÃO RAFAEL ARNÁIZ





São Rafael Arnáiz

É provável que haja mais santos ao nosso redor do que imaginemos. A canonização de um santo contemporâneo, jovem e tão próximo a nós como o Irmão Rafael Arnáiz é, por isso, uma grande notícia, a qual deve encher de orgulho a todos nós, os palentinos e de gozo a essa grande maioria que nesta terra se considera católica.

Em uma sociedade que voltou em boa medida as costas à existência de Deus, a figura mística do Irmão Rafael emerge com força para convidar-nos a olhar com os olhos do espírito o transcendente. Em um momento em que uma profunda crise terminou com nosso particular sonho do bezerro de ouro, talvez seja a ocasião de voltar o olhar ao céu e elevar-nos sobre um materialismo que nos esvazia a alma. A canonização deste monge da Trapa vem recordar-nos com seu testemunho quem somos, de onde viemos e aonde vamos.

O reconhecimento da santidade de Rafael pode impulsionar um renascimento espiritual que transcenda os limites de nossa província. Minha impressão é que há na Espanha um renascer de valores morais que estavam na raiz mesma de nossa civilização ocidental, mas que havíamos abandonado nas últimas décadas. Creio que o homem atual volta a olhar ao mais profundo de sua alma em busca de respostas.

A juventude de Rafael aumenta seu magnetismo entre as novas gerações que atuam sempre como vanguarda de toda mudança profunda. Os jovens, mais que nenhum outro setor da sociedade, estão reclamando hoje uma transição dos valores materialistas do egoísmo, do prazer, da morte e da violência em valores espirituais como o amor, a solidariedade, a justiça, a liberdade e a paz. Frente à corrente relativista dominante os jovens iniciaram uma busca da verdade autêntica. Não poderão encontrar melhor guia nesse caminho que um Hermano Rafael, o qual com sua humildade certamente faz raro que agora lhe chamemos santo.


Ignacio Cosidó
Diário Palentino


EN ESPAÑOL:


San Rafael Arnáiz

Es probable que haya más santos a nuestro alrededor de los que creemos. La canonización de un santo contemporáneo, joven y tan cercano a nosotros como el Hermano Rafael Arnáiz es, por ello, una gran noticia que nos debe llenar de orgullo a todos los palentinos y de gozo a esa gran mayoría que en esta tierra nos consideramos católicos.

En una sociedad que ha vuelto en buena medida la espalda a la existencia de Dios, la figura mística del Hermano Rafael emerge con fuerza para invitarnos a mirar con los ojos del espíritu hacia lo trascendente. En un momento en que una profunda crisis ha terminado con nuestro particular sueño del becerro de oro quizá sea la ocasión de volver la mirada al cielo y elevarnos sobre un materialismo que nos vacía el alma. La canonización de este monje de La Trapa viene a recordarnos con su testimonio quiénes somos, de dónde venimos y a dónde vamos.

El reconocimeinto de la santidad de Rafael puede impulsar un renacer espiritual que trascienda los límites de nuestra provincia. Mi impresión es que hay en España un renacer de valores morales que estaban en la raíz misma de nuestra civilización occidental, pero que habíamos abandonado en buena medida en las últimas décadas. Creo que el hombre actual vuelve a mirar a lo más profundo de su alma en busca de respuestas.

La juventud de Rafael aumenta su magnetismo entre las nuevas generaciones que actúan siempre como vanguardia de todo cambio profundo. Los jóvenes, más que ningún otro sector de la sociedad, están reclamando hoy una transición desde los valores materialistas del egoísmo, el placer, la muerte y la violencia hacia valores espirituales como el amor, la solidaridad, la justicia, la libertad y la paz. Frente a la corriente relativista dominante los jóvenes han iniciado una búsqueda de la verdad auténtica. No podrán encontrar mejor guía en ese camino que un Hermano Rafael al que con su humildad seguro que se le hace raro que ahora le llamemos santo.


Ignacio Cosidó
Diário Palentino



Nenhum comentário:

Postar um comentário